La pirotecnia es mucho más que un espectáculo de luces: detrás de cada explosión hay consecuencias graves que afectan a todos.
Desde hace muchos años es bien sabido que la pirotecnia con estruendo afecta a niños animales y la naturaleza.
Los animales, especialmente perros, gatos y aves, sufren un estrés extremo por el ruido, entrando en pánico , huyendo o incluso lastimándose al tratar de escapar.
Para los niños con autismo, los estruendos pueden ser una experiencia dolorosa , desencadenando crisis que impactan profundamente su bienestar y el de sus familias.
Además, los fuegos artificiales contaminan el ambiente, liberan sustancias químicas tóxicas que dañan el aire, el suelo y el agua , dejando residuos peligrosos a su paso.
Incluso su fabricación implica riesgos para los trabajadores y consume recursos de manera irresponsable.
Esta vez, hagamos la gran diferencia y celebremos con empatía y responsabilidad, buscando alternativas que no dañen a los demás.
La verdadera magia de las fiestas está en el amor , no en los estruendos.
Para que sean ¡Felices Fiestas!… decile NO a la pirotecnia
Fabian Conil Eco Radio 107.5 San Ignacio
ANG AGENCIA DE NOTICIAS GUACURARÍ
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