En una entrevista para el proyecto de Mujeres en Acción Guacurarí, Mariana Aratto compartió su historia, su recorrido y su mirada sobre la danza como herramienta de expresión, transformación y crecimiento personal.
Desde muy pequeña, Mariana encontró en la danza mucho más que una actividad artística, halló un lenguaje propio, una forma genuina de expresar aquello que no siempre podía decir con palabras. A los 5 años inició este camino que, con el paso del tiempo, se transformó en su proyecto de vida y en una referencia indiscutida de la danza en la provincia de Misiones.
“La disciplina, la constancia, los escenarios y mis ganas de crecer fueron el motor para seguir haciendo lo que amo”, relata. Apostar a la danza como profesión implicó asumir un compromiso profundo con la formación, el aprendizaje continuo y la transmisión de este arte, tarea que desarrolla desde hace 23 años a través de sus escuelas de danzas Mariana Aratto, con sedes en Capioví y Puerto Rico.

Maestros, aprendizajes y desafíos
Mariana se define como el resultado de grandes maestros que marcaron su formación, entre ellos Viviana Ramírez Boll, Myrian Pryts Nilson, Laura De Aira, Cerdán Aguirre, José Aguilar, Andrea Stick, Mahyra Saad, Yolanda Silvero y Hugo Salvatierra, a quienes admira y respeta profundamente.
A lo largo de su trayectoria, los desafíos fueron constantes. Uno de los más significativos ocurrió en Esquina, Corrientes, cuando con tan solo 15 años debió dirigir a 250 personas de todas las edades y montar un show coreográfico para la comparsa Carú Curá, siendo además su primer trabajo remunerado. “Cada día en mi profesión aparecen nuevos desafíos, y son ellos los que me impulsan a seguir creciendo y a transformarlos en logros”.
La danza árabe, un sello personal
Reconocida especialmente por su especialización en danza árabe, Mariana confiesa que esta disciplina cautivó su sensibilidad y la conectó profundamente con su femineidad. “Tiene la particularidad de ser alcanzable para personas de todas las edades. He visto mujeres que nunca imaginaron poder moverse descubrirse a través de esta danza”.
Si bien su primer amor fue la danza clásica, la danza árabe se convirtió en un sello de su identidad artística. Su riqueza musical, cultural e histórica, sumada a la libertad y fuerza expresiva que transmite, trascendió el escenario y le permitió acercar este arte a un público amplio y diverso.

Egipto, volver a las raíces
Mariana viajó en dos oportunidades a Egipto para perfeccionar su técnica, una experiencia que define como profundamente transformadora. “Egipto es cautivante, lleno de historia y cultura. Allí entendí que la danza árabe no se aprende solo desde la técnica, sino desde la conexión con sus raíces”, señala.
Formarse con maestros excepcionales y sumergirse en el folclore egipcio le permitió comprender los matices de cada movimiento. Su objetivo es claro traer esa esencia a la Argentina, compartirla y mantener viva la autenticidad de esta danza ancestral.
Una academia con visión inclusiva
La Academia de Danza MA nació en 2002 en la ciudad de Campo Grande. Posteriormente se trasladó a Capioví, donde funciona hasta la actualidad, y en 2013 se expandió a Puerto Rico, consolidando un proyecto sostenido en el tiempo.
Su visión siempre fue la misma hacer que la danza sea accesible para todos, sin importar la edad, el nivel o el contexto. “Creo que la danza tiene el poder de transformar vidas”. Por eso, promueve valores como la confianza, el trabajo en equipo, la disciplina y la expresión personal, generando un espacio de formación, contención y crecimiento humano.
El crecimiento de la escuela es, según Mariana, el reflejo del compromiso constante de sus alumnas y alumnos. La diversidad de edades y trayectorias fortalece un ambiente de apoyo mutuo y motivación, clave para consolidar la academia como un espacio de excelencia.

Eventos, certámenes y compromiso cultural
Como organizadora y referente, fue parte de importantes eventos, entre ellos los Premios Martín Fierro Nacional de la Danza en Misiones. “Cuando me lo propusieron no dudé un instante. Fue una gran oportunidad para Misiones”, destaca, valorando el desafío y la seriedad del proceso de casting, inédito en la historia de APTRA para la danza.
Sobre los certámenes, reconoce su impacto en la formación de jóvenes artistas, siempre que se prioricen el respeto, la transparencia y la calidad. “No me gusta que solo nos vean como números. El escenario es para compartir, experimentar y crecer”, sostiene, remarcando la importancia del criterio, la técnica y la responsabilidad artística.
Actualmente forma parte de LID – Liga Internacional de Danzas y Ritmos, donde colabora a nivel provincial, nacional e internacional, destacando la organización y el compromiso profesional.
Para Mariana, la danza ocupa un lugar fundamental en la cultura misionera, como expresión viva de su historia y del crisol de culturas que define a la provincia. “Encontramos danza en cada rincón de Misiones, en todos sus estilos, y siento que hoy se la valora mucho más”, afirma.
También celebra el crecimiento de las nuevas generaciones de bailarinas y bailarines misioneros, destacando su evolución técnica, creatividad y entrega, aun cuando los recursos son limitados. “Siempre ponemos alma, corazón y vida”
Cuando está en el escenario o acompañando a sus alumnos, Mariana no duda. “Es amor, simplemente amor”. Acompañar los logros de sus estudiantes y estar allí después de escena es, para ella, una expresión de humanidad plena.
La inspiran los desafíos, especialmente aquellos que parecen difíciles. Cree firmemente que cualquier niño, adolescente o adulto del interior puede llegar a ser bailarín profesional.
De cara al futuro, proyecta nuevos programas de formación más estructurados, que fortalezcan no solo lo técnico sino también lo pedagógico, y sueña con crear un multiespacio que permita ofrecer más disciplinas a la comunidad.
A quienes sueñan con dedicarse profesionalmente a la danza, Mariana les deja un mensaje claro y esperanzador. “Que nunca se cansen de seguir intentando. Todo llega a su tiempo. Dios ve lo que nadie ve”.

Sandra Krzcezkowski – Radio del Mercosur 93.7 – Campo Viera
Proyecto Mujeres Guacurarí en Acción
AGENCIA DE NOTICIAS GUACURARÍ



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