
A principios de abril, el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología, lanzó oficialmente el proyecto Kuaativo, un espacio de streaming interactivo diseñado para fomentar el intercambio de conocimientos y experiencias en áreas como la educación, el arte, la ciencia y la tecnología.
En apenas dos meses desde su lanzamiento, el proyecto se consolidó como un espacio digital donde el contenido emocional, humano y auténtico encontró su lugar y su público. Con una apuesta clara por hablar de lo que nos atraviesa: salud mental, vínculos, identidad, emociones, conectividad, la evolución de las pantallas, la toma de decisiones, emprendimiento y trabajo en la red, el proyecto superó las 176.000 visualizaciones orgánicas en redes sociales, marcando una tendencia que va más allá del algoritmo: la necesidad de sentirnos escuchados.
El desafío que Kuaativo se planteó desde el inicio (pasar de espectadores a comunidad) comienza a cumplirse, validando un enfoque basado en identidad, empatía y cercanía.
Además del crecimiento en audiencia y la conexión orgánica generada con la comunidad, uno de los pilares de Kuaativo en estos dos meses fue la presencia de profesionales que aportaron mirada, sensibilidad y herramientas valiosas. Psicólogos, Comunicadores, Especialistas en vínculos, salud mental y desarrollo personal, Profesores, alumnos, influencers, formaron parte de este espacio con una premisa común: hablar sin filtros y con profundidad de los temas que realmente importan.
Cada conversación fue un puente: entre generaciones, entre experiencias distintas, entre lo emocional y lo profesional. Su participación no solo enriqueció el contenido, sino que posicionó a Kuaativo como un espacio seguro, confiable y necesario para abordar realidades actuales desde la empatía y la escucha activa.
Se destaca la franja de 35 a 44 años, seguida de cerca por jóvenes de 25 a 34, confirmando que la propuesta dialoga especialmente con públicos que buscan contenido con propósito.
Kuaativo no es solo un canal de comunicación: es una experiencia que crece con cada persona que se anima a mirar hacia adentro, a compartir, a escuchar.
Desde el equipo de producción destacaron que además de lograr visibilidad, en estos primeros dos meses, se construyeron vínculos, se abrieron conversaciones necesarias y se consolidó un espacio donde la tecnología se encuentra con la humanidad.
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