
14 de junio de 1982, día de la máxima resistencia, ¡VIVA LA PATRIA! Tan solo 100 kilómetros separaban a las fuerzas de los Británicos de las Argentinas, debían llegar desde la Bahía del Estrecho de San Carlos a Puerto Argentino. Sin embargo, les tomó 24 días llegar, pero a costa de muchas bajas en el ejército británico.
También a nosotros nos costaron bajas y heridos mantener las posiciones, ante su lento avance, las que se perdieron no sin antes dar batalla. Ellos Armados hasta los dientes, guardia escocesa, Comando 45 de la Marina Real Británica, Regimiento de Paracaidistas 2 para Real Fuerza Aérea Británica, como parte de los casi 26.000 soldados de la Corona Británica.
Vinieron con su flota con dos portaaviones, varias fragatas misílisticas y destructores todos de última generación, buques de desembarco, una veintena de buques tanques, seis submarinos con propulsión nuclear entre ellos el HMS Conqueror, también el HMS Splendid, HMS Spartan, HMS Courageos, el HMS Valiant y también el convencional HMS Onyx. Y esa ayuda extra de la OTAN y nuestros vecinos con tareas de apoyo y espionaje para los británicos, para hacer gala de sus herramientas imperiales trajeron a su séquito de súbditos y mercenarios: Los Gurkas.
A ese lento avance podemos agregar, que desde el 1 de mayo de 1982 nuestra Fuerza Aérea mantuvo en «Jaque Mate» a la flota más poderosa del Mundo. No había tiempo para piedad en ambos ejércitos, ellos vinieron por lo nuestro y nosotros lo defendíamos, nuestra artillería fue tan feroz y eficaz como la de ellos.
Nuestros artilleros combatieron e hicieron tronar nuestras baterías hasta la orden de alto al fuego de los altos mandos militares, el mismo 14 de junio, al fuego del enemigo se lo combatió con más fuego, hasta el último día de combate un avión Hércules Argentino rompió el cerco mentiroso de las 200 millas de una «Zona de Exclusión», que solo existió para el enemigo.
Una y otra vez nuestra aviación rompió ese falso cerco, y en la turba Malvinera el sable bayoneta del soldado argentino no quedó en su funda, fue una lucha entre leones y pumas. En el área Continental de toda la Nación, miles de soldados con sus superiores como en Malvinas, estaban en sus puestos fusil en mano listos para dar batalla donde sea.
Un solo Ejército con una sola consigna: ¡Soberanía! Y un valiente militar con nervios de acero desarmaba bombas a punto de estallar con Dios como testigo de su hazaña. Hazañas en las Islas y en dónde la Patria reclamaba ese compromiso. El mito de los «chicos de la Guerra» apareció con la Posguerra y con los Iluminados de la posverdad, para que la culpa y la vergüenza sepultaran a la Gesta Patriótica.
Con las voces de los traidores que buscan deconstruir a la Gesta de Malvinas. Y hablan de «derrota espantosa», los miserables serviles a la Desmalvinizacion. ¡¡¡Aprendan de la lección al mundo del colonialismo que les dimos los argentinos con Nuestras Fuerzas Armadas!!!
El día de la Máxima Resistencia: 14 de junio de 1982 que hace a los 74 días de Defensa de la Soberanía Nacional, días que están entre las páginas de Honor de Historia de la República Argentina.
Páginas escritas con la tinta imborrable de la Sangre de nuestros 649 Hermanos Héroes Caídos por la Patria.
Marcelo Claudio Paolini VGM
Regimiento de Infantería Mecanizado 6 General Viamonte.
Monte Dos Hermanas.
Monte Tumbledown.
REPÚBLICA ARGENTINA.
Edición: J Mariano Valenzuela
Idea, producción y coordinación: Walter López
ANG- Agencia de Noticias Guacurarí
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