
La candidata a diputada provincial por el Frente Renovador Neo dialogó en la antesala de las elecciones legislativas del 8 de junio y compartió su mirada sobre los desafíos de Misiones, el rol del legislador y la importancia del arraigo y la innovación.
En un contexto político y social que exige compromiso, cercanía y visión de futuro, Aryhatne Bahr, candidata a diputada provincial por el Frente Renovador Neo, comparte con convicción lo que representa para ella esta nueva etapa: “Significa ser nada más ni nada menos que la voz de los misioneros en la Legislatura. Nuestros nombres son circunstanciales, pero el rol del legislador no cambia: estar cerca, escuchar, comprender y transformar esa cercanía en acciones concretas”.
Con una trayectoria vinculada al mundo digital, Bahr pone el foco en una problemática que atraviesa generaciones: los riesgos de la digitalidad. “Veo a diario los desafíos que enfrentan madres, padres, adultos mayores, docentes, adolescentes… Todos necesitamos herramientas y contención para vivir en este mundo digital sin quedar expuestos. Por eso, mi compromiso está ahí: acompañar, legislar, prevenir y proteger”.
Respecto a su decisión de sumarse al Frente Renovador Neo, remarcó que lo que más la movilizó fue “encontrar un espacio que construye desde todos lados, con ideas nuevas pero con los pies en la tierra. Este Blend entre innovación y arraigo es una verdadera síntesis misionera. No venimos a romper con el pasado, venimos a honrarlo y seguir construyendo”.
Bahr destacó especialmente el rol de los intendentes como actores fundamentales en el entramado político y social de la provincia. “Son quienes están todos los días al lado de su gente, quienes conocen cada barrio, cada historia. Queremos construir con ellos, a su lado. La cercanía no es un eslogan, es una forma de vida. Y eso se traduce en decisiones y leyes que verdaderamente representen a la gente”.
De cara al trabajo legislativo, subraya que uno de los grandes desafíos será “actualizar nuestras normas a los tiempos que vivimos, sin perder lo que nos hace únicos: nuestra identidad, nuestros recursos, nuestra autonomía. La tecnología atraviesa todo y tenemos que estar preparados para acompañar, proteger derechos y generar oportunidades desde cada rincón de la provincia”.
Finalmente, se refirió al contexto nacional y a cómo, desde Misiones, se puede construir unidad en medio de un país atravesado por divisiones: “El misionerismo no es una consigna, es una forma de vida. Creemos en la participación real, en la crítica constructiva, en el respeto por cada mirada. No hay transformación sin diálogo. Y si combinamos escucha, participación y presencia, vamos a construir una Misiones más fuerte y más unida, con un mismo norte: que los misioneros vivan mejor”.
Juana Gorczak – Alfredo Soarez
ANG AGENCIA DE NOTICIAS GUACURARÍ
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