
La directora de Cibercrimen de la Policía de Misiones analizó la evolución de los delitos informáticos en la provincia, el trabajo de prevención y la importancia de la evidencia digital en los procesos judiciales.
Mujeres Guacurarí en Acción se comunicó con Marylin Ozuna, comisario general de la Policía de Misiones, quien manifestó que no existe un solo tipo de cibercrimen, sino que se trata de delitos informáticos tipificados en el Código Penal o en leyes secundarias, transversales por el uso de la tecnología. “Hoy la evidencia digital está presente en múltiples casos. En una violencia de género encontramos evidencia digital y requiere la intervención de Cibercrimen; en una estafa que se realiza a través de las redes o del WhatsApp también se necesita la intervención. Son delitos ordinarios que fueron mutando y en la actualidad requieren un abordaje especializado”, indicó.
En ese sentido, destacó que las estafas continúan siendo el delito más común en la provincia y que se viene trabajando fuertemente para evitarlas. “Hoy por hoy las unidades regionales cuentan con divisiones de Cibercrimen en cada una de ellas”.

Explicó que, debido a la cantidad de habitantes, la mayoría de las denuncias se registran en la zona capital. Los casos no han aumentado ni disminuido, sino que se mantienen en una línea estable y, gracias a los medios, la gente está tomando conciencia y se genera una cadena de prevención. Esto lleva a que consulten la línea de Cibercrimen, disponible las 24 horas, antes de realizar transacciones para evitar estafas.
En cuanto a las estrategias de prevención, explicó que se trabaja a través de campañas publicitarias, redes sociales y materiales didácticos. “Hoy por hoy tienen muy buena aceptación los emojis y las caricaturas en forma de viñetas, que cuentan una historia y hacen que la persona se identifique con el problema que puede estar teniendo”, comentó.
Respecto a los desafíos que se presentan durante una investigación, explicó que los delitos transnacionales, que trascienden las fronteras tanto provinciales como nacionales, dificultan o demoran la tarea, que siempre se lleva adelante de la mano de un juzgado. A esto se suma la actitud de algunas personas que eliminan la evidencia digital por vergüenza o por miedo, lo que genera demoras en los procesos. “Esa situación nos obliga a destinar tiempo adicional para intentar recuperar la información y poder seguir avanzando, teniendo en cuenta que el tiempo también es un factor determinante en las investigaciones”, advirtió.

La Dirección de Cibercrimen, que también interviene en causas civiles y de violencia, se prepara para cumplir en diciembre diez años de funcionamiento. Al respecto, su titular resaltó: “Ha crecido de una manera notable, desmedida, en todo lo que es el ámbito provincial. Acompaña y asiste a los juzgados en la recolección de evidencia digital y en la preservación de pruebas que después son fundamentales a la hora de entablar un proceso judicial. Hoy por hoy un dispositivo celular trasciende todo tipo de delito, es transversal”.
Señaló que la Policía de la provincia debe estar capacitada, como lo está la Dirección de Cibercrimen, para poder asistir y acompañar tanto a las víctimas como a las personas que están siendo hostigadas, extorsionadas o que se encuentran en otras situaciones. El personal que atiende esas denuncias debe estar a la altura de las circunstancias para poder resolverlas.
Para finalizar, subrayó la incidencia de los medios de comunicación en la reducción de delitos: “Creo que tienen mucha influencia, en este caso ustedes que contribuyen a que la sociedad esté informada y prevenida”, cerró.
Graciela Maidana
Proyecto Mujeres Guacurarí en Acción
AGENCIA DE NOTICIAS GUACURARÍ
Facebook
Twitter
Instagram
Google+
YouTube
RSS