Ada Mabel Acosta ha emergido como un pilar fundamental para la protección y el bienestar de Campo Grande. Además de ser ama de casa, esposa, madre y orgullosa abuela de cinco nietos, ha sabido balancear su vida personal con una impresionante trayectoria de dos décadas al frente del Cuerpo Activo en la Asociación de Bomberos Voluntarios de Campo Grande.
La historia de Ada con los Bomberos Voluntarios comenzó el día en que la comunidad lanzó una convocatoria para abordar la problemática tras el incendio de dos viviendas. «Movida por el llamado, decidí unirme y desde entonces he dedicado mi vida a la protección y el auxilio de mi comunidad.»
A lo largo de su carrera, se ha preparado de manera continua, participando en cursos y capacitaciones constantes. «Esta dedicación al aprendizaje y la mejora continua me permitió asumir el cargo de jefa de Bomberos Voluntarios con confianza y habilidad.»
En su trayectoria, ha enfrentado numerosos desafíos, desde dejar a su familia durante emergencias hasta enfrentar situaciones con recursos limitados. Sin embargo, su compromiso y determinación la han llevado a superar cada obstáculo.
Uno de los logros que más enorgullecen a Ada Mabel es haber visto crecer tanto a la institución como a su equipo. «Bajo mi liderazgo, los Bomberos Voluntarios de Campo Grande han logrado una formación digna y sana, permitiéndonos cumplir con todos los servicios que la comunidad necesita».
Para Ada, liderar y motivar a su equipo implica «sacar lo mejor de cada miembro,» fomentando un ambiente de colaboración y trabajo en equipo. Enfrentar el fuego es una experiencia única para ella, describiéndolo como «un momento en el que me siento con superpoderes y capaz de hacer mucho con poco».
También destaca la importancia de la colaboración con otras organizaciones de emergencia, la cual se fomenta con «seriedad, compromiso y humildad.» En cuanto a la participación de la mujer en roles de liderazgo, Ada expresa su respeto y admiración, afirmando que «hoy en día las mujeres pueden desempeñar cualquier trabajo con la misma eficiencia que los hombres».
Ada Mabel Acosta no solo ha demostrado ser una líder ejemplar, sino también una fuente de inspiración para muchas mujeres que desean seguir sus pasos. Además, ha sido un modelo a seguir para su hijo, Franco Acosta, quien ha asumido el rol de sucesor y comparte con ella, codo a codo, el trabajo y la responsabilidad de proteger a la sociedad. Juntos, forman un equipo imbatible dedicado al servicio comunitario y a la seguridad de Campo Grande.
Mechy Ramirez – INFO Radio Chimiray 100.3
Proyecto Mujeres Guacurarí en Acción
AGENCIA DE NOTICIAS GUACURARÍ
Facebook
Twitter
Instagram
Google+
YouTube
RSS