Las ideas rectoras del proyecto político del misionerismo, del rescate de lo nuestro, de ser los misioneros soberanos de nuestro propio destino, de actuar mirando los ojos y las voluntades del pueblo misionero y no esperando una llamada de Buenos Aires para saber que decir, que pensar o cómo votar en el Congreso de la Nación, tienen como artífice a Carlos Rovira.
Los dirigentes del Frente Renovador, los gobernadores que han pasado en los últimos años, los intendentes, los diputados y la dirigencia en general, funcionan y se reconocen como articuladores de los conceptos políticos que Rovira les ofreció para trabajarlos despojados de toda vanidad pensando, siempre y primero, en el bienestar y el futuro de los misioneros.
No es una idea implantada la de configurar un espacio provincialista que responda para adentro de nuestras fronteras y no hacia afuera. Es una creación original y como tal es única y no se la debe desaprovechar en estas legislativas.
El misionerismo fue creado por un misionero, pero no por la vía de una ecuación teórica sino escuchando el corazón del mismo misionero que esperaba un norte distinto para sus vidas del que marcaban los dirigentes del país central, siempre alejados de nuestra realidad, o los dirigentes misioneros que responden y respondieron a las órdenes del país central.
El propietario del proyecto es la gente sencilla. La Renovación le dio forma y se volvió una humilde herramienta de ese pueblo. Los partidos nacionales, que mucho tiempo atrás hicieron tal vez un aporte importante a la conformación del país, hoy ya se volvieron vacíos y autoreferenciales. Se representan a sí mismos no a la gente y menos del interior. Se miran hacia adentro. Misiones, víctima de una injusticia geográfica, no será escucha a menos que diputados que respondan a las ideas del misionerismo lleven esa voz al Parlamento Nacional. Ahí se verá a quién responde cada uno. Este proyecto originario de nuestra tierra, la Renovación, enfrente de los otros proyectos “nacionales” que esconden una defensa los intereses del país central que casi nunca coinciden con los nuestros.
Los diputados de la Renovación son la mejor y única oferta que defenderá de verdad esos anhelos. Los otros lo dirán por decir, porque “queda bien” pero siempre estarán pendientes de sus verdaderos jefes que están a más de 1000 kms.
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ANG- Agencia de Noticias Guacurarí
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