
Mabel Zamo de Vargas: madre, de profesión depiladora, actual running y una de las más destacadas figuras del trail de la región del alto Uruguay, más precisamente en la localidad de El Soberbio. Es la organizadora del trail Esencia Salvaje, que se desarrollará el próximo mes de Abril del 2025. En diálogo con Mujeres Guacurarí en Acción, abrió su corazón y relató con detalle cada etapa de su vida.
De esa forma, comenzó contando su historia de vida en primera persona: “Me acompañé muy joven con 16 años, a los 18 años tuve mi primera hija en el año 2000, una época en la que había mucha escasez . Incluso muchas veces no tenía con qué alimentarse. Mi familia ganaba $70 pesos alquilaba y no alcanzaba para comer. Mi pareja no tenía trabajo fijo y cuando nació mi hija me separé».
«Vengo de 2 matrimonios fallidos 2 hijas hermosas que siempre me dieron fuerzas para vivir .luego de separarme entre en depresión que duró casi 4 años. La solución y mi cable a tierra fue el trail running, correr me salvó la vida. Hoy viajo por el país para competir, organizo carreras y siempre que puedo hago de psicóloga para las personas que pasan por lo mismo. La depresión nadie la ve porque nos escondemos, no contamos lo que sufrimos y nos aislamos», agregó.

Dentro del difícil contexto que le tocó vivir, contó: «Sufrí violencia de género y muchas veces lo normalizaba, creía que era algo normal. Pasé muchas necesidades, pero siempre traté de dar lo mejor a mi hija y que no le faltara nada. Con fuerza de voluntad logré salir adelante. No fue fácil cuando me separe y volví a la casa porque afuera encontré problemas peores y no me veía capaz de enfrentarlos sola con dos hijas pequeñas en un pueblo chico y sin mucho estudio. Pero me fui poniendo fuerte».
«A veces la justicia es lenta con estos casos y ahí es donde suceden los femicidios. Sin embargo hay que luchar, con miedo pero con fé de que va a mejorar. Es duro escuchar el reproche de los hijos y que te pidan que no te separes, porque para ellos no hay papá malo ni mamá mala, pero era una situación que me estaba enfermando y deteriorando psicológicamente. Estaba perdiendo las ganas de vivir. No obstante,cuando la justicia te apoya podes respirar y liberarte de ese entorno», expresó.
Para concluir, reflexionó: «Cuando uno es muy joven cuesta más, porque sin herramientas es difícil salir adelante, pero se puede. Yo cambié mi vida para siempre. Hoy, con 22 años más, me doy cuenta que no se necesita mucho para ser feliz».
Yohana Silva – El Soberbio
Proyecto Mujeres Guacurarí en Acción
AGENCIA DE NOTICIAS GUACURARÍ
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