La ANG visitó una unidad productiva con las características propias de cientos de espacios agrarios y vivencias iguales a esta, en nuestra Misiones profunda donde familias de agricultores, trabajan día a día, por sustento y progreso.
La chacra de Ramona Alvez y Osmar dos Santos, está ubicada a siete km. del pueblo, en una geografía atractiva, un lugar alto donde se observan paisajes con abundante vegetación y cielo cercano. Para llegar hasta allí, luego de dejar la Ruta Costera 2 -Juan Pablo II- se transita un km. de camino de tierra, bordeando un extenso potrero.
Al comenzar la charla, ante la pregunta sobre cómo transcurre su día, Ramona espontáneamente dijo: ¨a las corridas´- mi trabajo comienza a la mañanita, lo primero que hago es salir afuera porque las gallinas piden su comida igual que los chanchos y la vaca, a la que hay que alimentar especialmente, porque dio cría y el ternerito necesita una madre fuerte¨ – apunta, sonriendo- ¨y ella es una buena lechera¨. Su hija Victoria sigue el diálogo y aporta detalles de las actividades del día, en las que ella también colabora. La anfitriona, prosigue su comentario diciendo: ¨después tomamos unos mates y el ¨café de la mañana y mi compañero va a la chacra o sale a ayudar a un vecino, como hizo hoy, y yo a las verduras a sacar yuyos, y regar. En la chacra planta maíz, batata y otras plantas anuales, y también tabaco¨.
¨Hace dos años, logramos comprar una camionetita, y por eso me dediqué a plantar verduras,antes no podía porque no tenía medios para ir a venderlas¨.
Al recorrer los canteros de la inmensa huerta, se ve una buena producción de acelgas, lechugas, repollo, remolacha, rúcula como cebollitas y perejil, además de árboles frutales, recién plantados. Ramona muestra su camioneta, y comenta que cada semana lleva verduras al pueblo y las vende en los barrios periféricos, comenta: ¨vender verduras me permite disponer de dinero para alguna compra, los días que voy a vender, aumenta el trabajo porque hay que sacar las verduras con paciencia, para no dañar la planta que sigue produciendo, esa tarea me lleva tiempo, son horas de agacharme en los canteros¨, ante la pregunta- y la columna? responde ¨y duele, generalmente tengo que tomar alguna pastilla, sino no aguanto, porque luego hay que acomodar la verdura, y principalmente poner cuidado en el lavado, nos quedamos hasta las nueve de la noche, para dejar todo listo y así salgo al otro día temprano al pueblo¨.
A la par de la conversación toma un balde porque es ¨Hora de sacar la leche y llevar al ternerito con su mamá para que se alimente¨. Con un lazo sujeta una pata del animal yexplica que ¨tiene la costumbre de dar patadas¨ y trae al ternerito junto a su madre que inmediatamente comienza a mamar. Explica que esa leche no se puede consumir todavía, pero hay que sacarla. Tareas cotidianas de la gente que vive en la chacra.
Su esposo Wilson Dos Santos llega desde un Paraje cercano, viene de ayudar en trabajos rurales a un amigo y cuenta: ¨Hacemos cambio de día, yo lo ayudo con la motosierra a desmalezar, preparar la tierra y plantar tabaco, y otro día cuando yo necesite, el viene a ayudarme, porque la situación económica no nos permite pagar un peón por eso ´cambiamos día¨.
Una relación agraria que según cuenta, es común en la zona. Esforzados colonos misioneros que para progresar buscan comercializar los productos que con esfuerzo producen. Ramona, una mujer laboriosa de la chacra que se muestra agradecida con los vecinos del pueblo, diciendo: ¨yo siempre vuelvo contenta del pueblo porque me compran todo lo que llevo, y eso me anima y me da más ganas de trabajar¨. Despidiéndose, afirma¨Esta es mi vida, crecí en la chacra y no cambio por nada, vivir en la chacra es lo mejor que hay¨.
#ANGUACURARI
Catita Argañaraz – Fm America.
El Soberbio
ANG Agencia de Noticias Guacurarí
Coordinación General Walter López
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